03 Nov Rehabilitaciones de fachadas ¿Qué aspectos tener en cuenta?
La rehabilitación de una fachada no consiste únicamente en un lavado de cara del edificio. Es decir, no se trata solamente de responder a necesidades puramente estéticas. Más bien, es conveniente tener en cuenta las carencias funcionales a la hora de abordar un proyecto de tal magnitud.
De hecho, los beneficios de la rehabilitación de la fachada son numerosos. Si bien es importante atender a una serie de aspectos que son de vital importancia para obtener el mejor resultado. Cuestiones como el tipo de fachada y su antigüedad o la extensión de la superficie a rehabilitar entran en juego y son, ciertamente, determinantes para nosotros.
Factores a valorar a la hora de abordar una rehabilitación de fachada
De ellos dependerá, por ejemplo, el coste de la intervención o el sistema más adecuado a aplicar a la hora de proyectar los trabajos. Como es lógico, cuantos más metros cuadrados tenga, mayor será el esfuerzo, los materiales a utilizar y, por lo tanto, el precio de la factura de la fachada a restaurar.
Asimismo, no es igual trabajar en una fachada ligera (también llamada muro cortina) que hacerlo sobre una fachada pesada, una ventilada (generalmente compuestas por un muro de soporte con una capa aislante y un revestimiento de poliuretano), una tradicional o una en la que se ha implementado un sistema SATE.
Tampoco lo es rehabilitar un edificio cuya antigüedad es superior a los 40 años que hacerlo sobre uno cuya construcción es más reciente. En el primer caso, es obligatorio que verifiquemos que se cumplen las directrices que se marcan en la Inspección Técnica de Edificios (ITE).
Por todo ello, es clave analizar y emitir un diagnóstico del estado del inmueble antes de iniciar las tareas correspondientes. El grado de deterioro de la fachada influirá de forma determinante, como también el hecho de que esta cuente o no con adecuados sistemas de aislamiento térmico y acústico e impermeabilización.
¿Qué sistemas son los más empleados para rehabilitar fachadas antiguas?
Dicha evaluación deberá llevarla a cabo un arquitecto técnico profesional, que será quien dictamine qué sistema será el más adecuado aplicar para restaurar una fachada antigua. En cualquier caso, las alternativas más solicitadas son las siguientes:
- Mortero de monocapa: este sistema emplea un revestimiento compuesto por cemento y otros aditivos como arena o fibras de vidrio.
- Enfoscado de cemento: es la solución más sencilla y de menor coste, si bien también es la que menos garantías nos ofrece. Además, requiere un mantenimiento mayor.
- Sistema de aislamiento térmico exterior (SATE): se aplica un revestimiento formado por placas aislantes que arrojan un rendimiento excelente, principalmente porque aumentan considerablemente la eficiencia energética del inmueble.
Realmente, los beneficios de la rehabilitación de una fachada en mal estado pueden traducirse en un ahorro energético de hasta un 50 %, sobre todo en ubicaciones donde son habituales las condiciones climatológicas extremas. Evidentemente, estos trabajos contribuirán a mejorar la nuestra sostenibilidad y seguridad del inmueble.
Tampoco hay que pasar por alto que la mejora a nivel estético es importante. Y todo ello, en conjunto, se traduce también en una revalorización del edificio rehabilitado en el mercado inmobiliario.
¿Por qué apostar por ConfiAsistencia para los beneficios de la rehabilitación de fachada?
Los argumentos que podemos esbozar para responder a esta pregunta son muchos y de peso. ConfiAsistencia, empresa de reformas integrales en Toledo, tenemos a nuestro favor el aval de una dilatada trayectoria a sus espaldas. Además, contamos con un equipo multidisciplinar de profesionales capacitado para ofrecer a los clientes soluciones a medida y abordar toda clase de proyectos constructivos. Pon en nuestras manos la rehabilitación de la fachada de tu inmueble y no te arrepentirás. ¡Te damos facilidades de financiación!
No Comments